8.7.10

Manifiesto por la filosofía/Alain Badiou


El Arte:

Es la producción impersonal de una verdad que se dirige a todos.

Es siempre la verdad de lo sensible en tanto qua sensible.

Transforma lo sensible en acontecimiento de la Idea.

Procede de una forma impura, cuya purificación compone la historia, tanto de la verdad artística como de su extenuación.

Los sujetos de una verdad artística son las obras que la componen.

Es la segunda formalización de la llegada de una forma como informe.

Su no imperialidad es a fortiriori.

Es una aA abstracto; en el sentido: se abstrae de toda particularidad y formaliza ese gesto de abstracción.

Está ligada a un aristocratismo proletario.

Hace lo que dice, sin acepción a las personas.

No considera a ningún público en particular.

Debe ser tan riguroso como una demostración matemática, inesperado como un ataque nocturno y tan elevado como una estrella.

Se hace solamente a partir de lo que no existe para el Imperio.

Construye abstractamente la visibilidad de la inexistencia.


*


Debemos ser despiadadamente nuestros más despiadados censores, pues el Imperio, convencido de su control sobre los discursos, ya no censura nada. El abandono a tal auto-consentimiento de goce, arruina todo arte y todo pensamiento. Es ignorar la transmutación, robarle voz y por ende, poder.